Cada vez es más habitual la compraventa de compañías. Cuando una compañía compra a otra debe cambiar de nombre o transferir todos los bienes de la antigua compañía a la nueva. Uno de los activos más preciados de las empresas son los activos intangibles entre los que destacan las marcas, los nombre comerciales.
Este cambio de titularidad de una marca es laborioso puesto que cada tipo de bien requiere de un procedimiento de cambio de titularidad específico.
En el caso de las marcas, la inscripción del cambio de titularidad de una marca debe realizarse mediante una modificación formal ante la Oficina Española de Patentes y Marcas (OEPM) para actualizar la titularidad de la marca. A continuación, explicamos el proceso a seguir y los trámites que se deben realizar.
El primer paso para cambiar de titularidad una marca o nombre comercial (signos distintivos) es llegar a un acuerdo entre ambas partes. Este acuerdo se deberá dejar registrado, el cedente y el cesionario podrán utilizar un documento público o bien un contrato entre las partes. Además, es obligatorio la liquidación de los impuestos que procedan ante la Agencia Tributaria.
Posteriormente, una vez que se ha llegado a un acuerdo y se ha formalizado el cambio de titularidad mediante el documento correspondiente, se debe proceder a la solicitud de modificación de la marca ante la Oficina Española de Patentes y Marcas (OEPM).
La Oficina Española de Patentes y Marcas exige, a día de hoy, la utilización de un formulario específico a la hora de inscribir una cesión de uno o varios signos distintivos. Este formulario se puede encontrar en la OEPM o bien directamente aquí: Formulario de inscripción de cesión de signos distintivos OEPM
Para la realización del formulario se deberá adjuntarse uno de los siguientes documentos (a elección de los interesados):
El documento de transferencia es un documento mediante el cual la parte cedente transfiere a la parte cesionaria, que la adquiere, la titularidad de los signos distintivos señalados. En otras palabras, las partes al rellenar y firmar este documento están transfiriendo la marca.
Una vez presentada la solicitud de modificación de la marca, la OEPM llevará a cabo el proceso de registro del cambio de titularidad. Es importante realizar este trámite de manera correcta, puesto que en caso contrario, la Oficina Española de Patentes y Marcas emitirá un suspenso que provocará un retraso en la inscripción, así como un incremento de costes
Finalmente, es fundamental tener en cuenta que el cambio de titularidad de una marca no afectará a su fecha de renovación. Por lo tanto, es responsabilidad del nuevo titular asegurarse de cumplir con los plazos de renovación establecidos para mantener la validez de la marca.
Otro proceso distinto es la cesión del uso de una marca. Este proceso no es una transferencia de la titularidad de una marca, sino una licencia de la misma.
Mediante esta licencia de uso de la marca, el licenciante cede los derechos de la marca al licenciatario a cambio de un importe económico. Sin embargo, la titularidad o propiedad de la marca continúa siendo del licenciante, puesto que no ha sido transferida.
Este tipo de negocios (licencia) son muy habituales en las franquicias donde el propietario de la franquicia licencia / cede el uso de su marca para que otra persona pueda hace uso de la misma legalmente.
La diferencia entre la cesión y la transferencia se encuentra en el cambio de nombre, dado que en la cesión de uso, la titularidad permanece intacta, no hay traslación de dominio. En cambio, al realizar una transferencia o cambio de titular, como su nombre indica, la persona registrada como el titular de la marca cambia al del licenciatario. En la cesión o transferencia se produce una traslación del dominio, inscribiéndose en el registro la titularidad del nuevo propietario.
Además, es importante destacar que la cesión de uso de una marca permite al licenciatario utilizar la marca de acuerdo con los términos y condiciones estipulados en el contrato de licencia, pero el licenciante conserva el control sobre la calidad y la naturaleza de los productos o servicios asociados con la marca. Esto significa que el licenciante puede imponer ciertas restricciones sobre cómo se utiliza la marca para proteger su reputación y mantener la coherencia en su imagen de marca.