La patente consiste en una modificación sencilla en el neumatico de las aeronaves que hace que este gire a una velocidad adecuada en el momento de la toma de tierra, para que el derrape sea nulo o minimo. Con ello conseguimos varias ventajas; menor ensuciamiento de la pista, menor esfuerzo de los neumaticos y por consiguiente menor esfuerzo en el tren de aterrizaje, menor desgaste del neumatico con el consiguiente ahorro de costes, aterrizaje de la aeronave mas suave, y quizás lo más importante sea la seguridad ya que al eliminar el derrape la aderencia del neumatico con la pista es máxima, lo que tendrá mayor importancia en días de viento, nieve, lluvia, niebla, hielo, etc.