¿Tienes una bodega? Debes registrar tu marca en la clase 33.

Si tienes una bodega, ya sea grande o pequeña, con más o menos referencias, debes sin duda tener protegida tu marca en la clase 33. ¿Por qué?

El registro de una marca, si bien no es obligatorio, es muy recomendado en ciertos negocios como por ejemplo el de una bodega. La producción de vinos o cavas genera grandes gastos para sus productos que sólo pueden ser contrarrestados con la venta del producto y dicha venta está fuertemente relacionada con la marca que identifica el producto.

La venta del producto (vinos, cava, …) siempre está ligada con una marca. Puede ser una marca que identifique la bodega (ejemplo: Freixenet) o bien una marca que identifique el producto concreto (Carta Nevada).

La marca para vinos, cavas y otras bebidas alcohólicas debe ser registrada en la clase 33 (Bebidas alcohólicas (excepto cervezas)).

La marca, recordamos, ofrece a su titular una serie de derechos, entre los cuales destacan el derecho de uso (importante para poder exportar y no tener problemas en las aduanas) y el derecho de impedir que otros utilicen la marca ya sea idéntica o similar.

Antes de registrar una marca para tu vino debes comprobar que dicha marca se puede registrar mediante un informe previo. El registro de una marca no es sencillo puesto que no solo requiere solicitar la marca sino posteriormente vigilar que nadie la infrinja en cuyo caso se deberá defender. Por este motivo es muy recomendable registrar una marca a través de un profesional que te asesorará cómo no gastar más recursos de los necesarios en el registro y protección de tu marca.